Colza

La necesidad de introducción de nuevos cultivos que se adapten a la agricultura regional de secano ha motivado que la colza se convierta en una alternativa del monocultivo cerealista.

La colza es una planta herbácea anual de la familia de las crucíferas que se utiliza como oleaginosa, con la finalidad de extraer aceite de sus semillas. En los últimos años esta materia prima es muy demandada por la industria del biodiesel, lo que ha llevado a un incremento de la superficie cultivada en Castilla y León.

Es un cultivo de invierno muy rústico, capaz de soportar las temperaturas extremas del invierno y las oscilaciones de la primavera. Tiene una raíz pivotante que mejora la estructura del suelo y permite el aprovechamiento de nutrientes que no han sido utilizados por el trigo o la cebada.

El Observatorio de Plagas ha incluido al cultivo de la colza en el Sistema de Vigilancia y Control de Plagas con el fin de conseguir una detección temprana, la evaluación de los riesgos derivados y la consiguiente emisión de avisos y recomendaciones al sector.